Una de mis comidas favoritas son los San Jacobos que hace mi madre, pero no me los hace siempre que a mi me gustaría y por suerte en el bar de los padres de uno de mis amigos siempre tienen los San Jacobos en el menú ya que tienen un distribuidor de San Jacobos congelados para la hostelería y siempre que me apetece comerme un San Jacobo voy hasta allí y en un santiamén me hacen uno con patatas.
Hace ya bastante tiempo que no voy a ese bar porque el padre de mi amigo ha estado en el hospital bastante recientemente y no quería molestar a la madre que ahora se tenía que encargar de todo en el bar. Porque allí aunque trabaja uno de los hermanos de mi amigo, no es que se esfuerce demasiado y trabaja lo justo sin que nadie le estrese. Por lo menos conmigo ya no tiene la actitud que tenía hace unos cuantos años en los que discutía por todo, parece que con la edad se ha vuelto un poco menos arisco y más amable pero solamente con quien él quiere. Supongo que volveré pronto al bar ahora que el padre de mi amigo ya está algo mejor, y así de paso aprovecho para felicitarles las navidades a los padres de mi amigo que siempre me han tratado como si fuera de casa.
supongo que durante estas navidades iré hasta el bar unas cuantas veces y no solamente a felicitar las fiestas, pero como mi amigo está trabajando hasta bastante tarde no le da tiempo para poder descansar e ir por las noches a tomar unas copas como hacíamos antes todos los fines de semana. Ahora vamos más o menos una vez al mes y dando gracias.
Está claro que podría ir cualquier día para tomarme unos vinos pero prefiero que cuando vaya al bar vaya con mis amigos y no solo, por lo menos si voy con los amigos tengo con quién hablar. Que allí me conocen casi todos los señores que van pero no tengo la misma confianza que con mis propios amigos.