En el mundo de los negocios trabajar bien es importante, pero dar una buena imagen puede marcar la diferencia con otros negocios. Estos son tres detalles que pueden inclinar la balanza a tu favor.
- Tener material de oficina personalizado. Si tienes que dar un presupuesto por escrito o tienes que enviar una factura a tus clientes, hacerlo con papel de carta de calidad y personalizado en sobres con el membrete de tu empresa marcará una gran diferencia. De cara a tus clientes, tu imagen será absolutamente impecable y estará a la altura de las empresas de más prestigio.
Si tu negocio es pequeño, tu volumen de cartas y sobres será bajo y podrás permitirte invertir un poco en estos productos ya que será propaganda a tu favor. Cuando tus clientes reciban tu presupuesto en un sobre personalizado, tendrán la mejor impresión de ti y de tu negocio y estos pequeños detalles marcan la diferencia con la competencia y redundan en mayores posibilidades de negocios.
- Contar con un servicio de recepción de llamadas. Cuando tienes una pequeña empresa, a veces en tu casa, te conviertes en un esclavo del teléfono. Porque sabes que si no contestas a todas las llamadas, los clientes podrían marcharse a la competencia. Una manera de no perder llamadas ni recados, pero sin tener que pasarse el día colgado del móvil es con un servicio de recepción de llamadas personalizado.
Puede contratarse solo para determinadas horas y una persona, que contestará del modo en que lo haría un secretario en un despacho, tomará nota de los recados y te los hará llegar por correo o por mensaje de teléfono según pactado.
Dará una imagen muy profesional de tu empresa y tú podrás dedicar un poco de tiempo a tu ocio personal o a trabajar sin la interrupción constante del teléfono.
- Disponer de una dirección de prestigio. Es otro servicio que es posible contratar con algunas empresas. Se trata de edificios de coworking que albergan a varias empresas. Ni siquiera es necesario estar físicamente allí, pero se podrá utilizar legalmente la dirección y se recibirá allí correspondencia y paquetería. Incluso pueden alquilarse salas y despachos por hora para recibir a clientes.
Una dirección de prestigio puede dar una imagen mucho más profesional y competente de cara a tus posibles clientes. Además, te permite preservar la intimidad de tu domicilio cuando es tu lugar real de trabajo o al menos el habitual.